lunes, 29 de mayo de 2023

Vocación de comunión

Domingo de la Trinidad

Vocación de comunión (Jn 3, 16-18).

Estamos hechos, nos dice la Biblia, “a imagen y semejanza de Dios”, y por eso para descubrir quiénes somos debemos acudir a Dios, y para descubrir quién es Dios hemos de acudir a lo más auténticamente humano de nosotros. Y lo más auténticamente humano de la persona es la llamada a la comunión que percibimos en todo lo que hacemos y vivimos.

La familia en la que crecemos está llamada a ser imagen de la comunión del Padre, el Hijo y el Espíritu. Nuestro anhelo de encontrar buenos amigos con los que compartir vida, es signo de la comunión que nos hace ser. La relación de pareja es el icono más profundo de la Trinidad. En la Trinidad todos se entregan por entero, y en eso está su gozo; nadie busca lo suyo ni pretende protagonismo, el Hijo sabe que le debe la vida al Padre y éste le entrega toda su vida al Hijo; ninguna de las tres personas es más que las otras y reciben la misma adoración y gloria. El Espíritu que se nos comunica es justo el Amor entre el Padre y el Hijo.

También la Iglesia, nuestra comunidad, ha de ser imagen y signo de esta comunión trinitaria. También nuestra sociedad ha de configurarse de manera en la que todos busquemos el bien común, el bien de los más débiles y encontrar en eso nuestro gozo. El egoísmo siempre es triste y entristece. La alegría del compartir se ve colmada con la paz profunda que procede de la comunión íntima con Dios. Descubre en ti ese anhelo profundo de comunión.


lunes, 22 de mayo de 2023

Necesitamos tu Espíritu

Domingo de Pentecostés

Necesitamos tu Espíritu (Jn 20, 19-23).


Sin tu Espíritu, Señor, no podemos avanzar; sin tu Espíritu nos faltan la ilusión y la fuerza, nos falta la alegría del evangelio, no podemos amar de verdad. Sin tu Espíritu nos acostumbramos a las injusticias; y acabamos por no ver el sufrimiento de nuestros hermanos. Sin tu Espíritu nos acostumbramos con nuestros pecados y todo se vuelve justificaciones de nuestros pactos con la mediocridad. Nuestro amor se vuelve tibio, nuestros pensamientos excusas, nuestras verdades relativas, nuestro compromiso se reduce a una frase redonda y manida en alguna red social. 

Sin tu Espíritu nuestra vida se hace vieja. Necesitamos tu Espíritu que nos lance a anunciar el Evangelio a todos nuestros hermanos, a ser testigos de tu amor y tu justicia en medio de las oscuridades de nuestro mundo.

En España, en el año 2023 los enfermos de cáncer con fuertes sufrimientos tienen que pagarse de su bolsillo los medicamentos “de rescate” del dolor; y si no lo tienen no hay respuestas a sus punzadas. En nuestros pueblos la mayoría de los jóvenes no pueden pagarse una vivienda donde realizar su futuro, donde caminar en familia. En nuestro país se dedica más dinero a financiar abortos que a apoyar a las familias numerosas; y se hacen cuentas sobre cuánto dinero nos ahorrará la ley de la eutanasia. 

Y los cristianos parecemos dormitar, pagados de tradiciones, conformistas con nuestra falta de energía evangélica. Necesitamos más que nunca tu Espíritu, Señor, que nos haga reaccionar.


martes, 16 de mayo de 2023

Ascensión del Señor

Evangelio del Domingo de la Ascensión

“Cuando callas...”.


Me gustas cuando callas porque estás como ausente,

Y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca. ...

Déjame que me calle con el silencio tuyo.

En el silencio de la persona que amamos encontramos su intimidad, su ser inaccesiblemente cercano, el misterio de su persona que no queremos desvelar porque amamos el misterio. Cuando la persona que amamos calla, y camina en silencio a nuestro lado nos hace más libres, más auténticos, más nosotros mismos. A veces, tanta palabra se convierte en palabrería, y necesitamos la música callada de su mirada, que nos contempla atareados viviendo, creando. 

La ascensión de Jesucristo es esto mismo. Jesús asciende y nosotros contemplamos su silencio que nos descubre la inmensa grandeza de su ser. Jesús asciende y nos deja en radical autonomía, absolutamente responsables de nuestra vida, de nuestro mundo, de nuestro hermano. Jesús asciende y permite una nueva comunión con Él a toda persona, sea cual sea el lugar en el que se encuentre, el momento que esté viviendo de su historia. Jesús asciende y, por eso, lo podemos encontrar en la profundidad más cotidiana. Él, en cambio, abre el espacio de nuestra vida para que seamos nosotros mismos.  

Déjame que te hable también con tu silencio

Claro como una lámpara, simple como un anillo.

Eres como la noche, callada y constelada.

Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.

La poesía es siempre más que el poeta.


lunes, 8 de mayo de 2023

Dar razón de nuestra esperanza

Evangelio del Domingo

Dar razón de nuestra esperanza (Juan 14,15-21)

Más allá de las estructuras de la Iglesia, lo más importante y lo que define de verdad a la comunidad de los cristianos es el anuncio del evangelio con la vida. En circunstancias muy distintas, en contextos culturales y políticos diversos, en medio del “beneplácito” de las autoridades o de la persecución más o menos abierta, la Iglesia pervive por el anuncio que los creyentes concretos hacemos del Evangelio de Jesucristo. Cuando un creyente testimonia que Cristo es el sentido verdadero de su vida, la iglesia, no es que crezca, se realiza, es lo que está llamada a ser.

Lo que tú haces cotidianamente al decir con sencillez que eres cristiano, que participas en la iglesia, que rezas al Señor con confianza, que intentas vivir con las actitudes de servicio y amor al pobre con las que él vivió, lo que haces cotidianamente como cristiano esto es lo más importante, lo esencial de la iglesia, y no puedes cejar en esa tarea de evangelización. Las misas, las oraciones, las catequesis, los grupos eclesiales... todo es importante y necesario, pero lo esencial es que cada cristiano dé testimonio de que en Cristo encuentra la luz y la fuerza, el consuelo y los desafíos que le hace vivir con esperanza.

No abandones nunca la actitud humilde de quien se sabe sostenido por el amor del Padre. No cejes nunca de vivir en el bien porque es Jesucristo mismo quien reza por ti y promete enviarte su Espíritu. La caridad que Cristo pone en nuestra vida nos urge a vivir como Él, acogiendo la llamada que nos hace a dar razón de nuestra esperanza.


lunes, 1 de mayo de 2023

Palabras sencillas

Evangelio del Domingo

Palabras sencillas (Juan 14,1-12)


Las comparaciones que se hacen de Jesús en el Evangelio son siempre con realidades muy sencillas: el camino, la puerta, la roca, la vid, el sembrador... El encuentro con Él en nuestra vida también se produce en lo sencillo, en el lado humilde de la vida.

Ese lado pobre y humilde de la vida es vivido, sobre todo, en la familia, en nuestra familia, con sus luces y sus sombras, con sus limitaciones y sus riquezas. En la familia aprendemos a ganar y a perder en los juegos con nuestros hermanos. En la familia aprendemos que siempre tenemos que ir al ritmo del más pequeño, del más débil. En la familia aprendemos a acoger con paciencia los defectos o las “peculiaridades” de los demás. En la familia aprendemos a amar, al ser amados incondicional y gratuitamente.

En la familia aprendemos la dignidad del trabajo y del trabajador, y lo que sufren los pobres cuando falta el sustento diario o se consigue en constante inseguridad. En la familia aprendemos el sentido profundo y verdadero de la justicia social y de la solidaridad.

En la familia se nos despierta al sentido profundo de la vida, a la belleza y a la armonía, a la dignidad personal y a la compasión con el que sufre. En la familia se nos abre a la confianza cierta de que el amor tiene la última palabra, a la fe sencilla, alentada en la respiración misma, de que lo primero es Dios. “Vosotros sois mis hermanos, somos una familia”, otro nombre sencillo que Cristo se da a sí mismo.