Evangelio del 19 de enero del 2020
Juan, el Bautista, era un antiguo; perdónenme que lo diga, así, con trazo
grueso. Juan guardaba el perfil de los profetas antiguos; vivía una vida
ascética, rehuía las ciudades –donde se daban cita la corrupción y el vicio--,
se permitía encarar e interpelar moralmente a los más relajados de la sociedad
de su tiempo. Su denuncia de la corrupción de moral sexual de Herodes lo llevó
a la muerte. Su familia tenía cierto “viso”, su padre era sacerdote y oficiaba
por turno en el Templo de Jerusalén. Pero era un antiguo de los buenos, de los
coherentes a carta cabal, de los que no se “casan” con el poder, ni se arriman
al sol que más calienta, de los que tratan al pobre y al rico con la misma
actitud de sinceridad y de respeto; de los que buscan sinceramente la voluntad
de Dios en su vida y se ponen incondicionalmente a su servicio.
Lo más grande que hizo Juan fue descubrir y señalar a Jesús, el de
Nazaret, un aldeano sin estudios, como el enviado de Dios. Y esto, a pesar de
que Jesús (perdónenme de nuevo la simplificación), era demasiado moderno para
sus criterios. Jesús en vez de retirarse al desierto iba de ciudad en ciudad;
en vez de mostrarse ascético y distante, gustaba de dialogar y reír entre la
gente; en vez de recriminar y reñir, en cuando veía la actitud de arrepentimiento
de una persona la acogía, la perdonaba, restañaba sus heridas y la devolvía
sanada a su vida. Interpretaba la ley del descanso semanal de forma flexible, y
hasta defendía a adúlteras, publicanos y prostitutas. Todo esto hizo dudar a
Juan, que mandó a preguntarle si él era el que tenía que venir o teníamos que
esperar a otro. Jesús le respondió con lo esencial del evangelio: “Mi misión es
que los cojos anden, los ciegos vean, que las personas recuperen su dignidad y que
a todos se les anuncie la esperanza de que Dios es Padre de Bondad”.
¡Pero hay tanto orgullo vano que nos impide mirar lo esencial…! Nos dividimos,
nos criticamos y el Evangelio, sin anunciar.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar